A finales del siglo pasado y principios del actual, ahondaba en los miembros de la Junta de Gobierno una profunda preocupación por el estado de conservación de nuestra Sagrada Titular, así en una reunión de la Junta a principios de Junio del año 2001 se acuerda proceder a la Restauración de la Virgen, previa autorización de la autoridad eclesiástica y tas realizar la preceptiva consulta a la Asamblea General de Hermanos.
Una vez conseguida la autorización eclesiástica y el visto bueno de la Asamblea General, cuya reunión se celebro en Julio de ese año, se iniciaron los contactos con varios restauradores, acordándose en una reunión de la Junta de Gobierno celebrada a principios de Agosto encargar la restauración al equipo de restauradores formando por los profesores de la Universidad de Granada Doña Teresa Espejo Arias, Don Domingo Campillo Garcia y Don Carlos Zubeldia Santoyo.
Una calurosa tarde del mes de septiembre, el equipo de restauradores se desplazo a Rute para hacer el estudio preliminar,proceso que duro mas de cuatro horas.A las pocas semanas, la Junta recibió el estudio sobre el estado de conservación de la Imagen,el proceso de restauración a llevar a cabo, el presupuesto económico y los preceptos legales por los que se llevaría a cabo la restauración.Dicha propuesta fue aprobada por la Junta, acordándose que la restauración se llevaría a cabo entre el Miércoles de Ceniza y el Viernes de Dolores del año 2002.Durante las Fiestas del año anterior, la Junta había tenido la precaución de conseguir tener un superhabit suficiente como para poder hacer frente a los gastos de la restauración, pero esto no fue necesario, pues varios devotos costearon la totalidad de la restauración, estos devotos fueron Doña Maria Jimenez Jimenez que costeo el cincuenta por ciento y Don Raimundo y Doña Maria Perez Granados que costearon el otro Cincuenta por ciento.
La Virgen fue trasladada a Granada el Miércoles de Ceniza, iniciándose al día siguiente el proceso de restauración, durante los 40 dias que duro la intervención, el Presidente de la Cofradía, Zacarias Jimenez mantenía una conversación telefónica diaria con los restauradores para estar informado de la marcha del trabajo, así como acompañado por varios miembros de la Junta de Gobierno viajo en varias ocasiones a Granada para ver in situ la restauración.
Durante el proceso se descubrió que la Virgen es de talla completa hasta la cintura, con el tallado de un corpiño con dibujos de adornos florales, así como en la parte trasera de la cabeza hay restos de pintura que asemejan a una mantilla.El cuerpo de la Virgen se protegió con una tela de gran dureza para protegerlo de los alfileres que pudieran causarle algún daño al vestirla. Después de la restauración la Virgen se mostró de nuevo a la veneración de los fieles el Lunes Santo del año 2002.
By.- Z.J
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