Amanecía ayer en Rute un día radiante y esplendido. A las 9 y media de la mañana comienza la Solemne función religiosa presidida por D. Carmelo María Santana Santana, consiliario de la Real Hermandad, tras la cual se produjo el momento por todos esperado de la bajada de María Santísima desde el Altar hasta situarse en el centro del Templo de San Francisco, entre los canticos de los coros, vítores y palmas de los allí presentes que hacían pequeña en aquellos momentos la parroquia.
Triunfal salida a través de su recién restaurado pórtico de entrada a la parroquia, entre los cientos de personas que esperaban en el Llano de San Francisco y que a lo largo de la mañana se habían ido reuniendo. Esplendido cortejo que era encabezado por las insignias de Nuestra Real Hermandad, tras ella se congregaban las representaciones de las cofradías de la Virgen de la Cabeza de diferentes localidades, Colomera, Cabra, Baena, Palma del Rio, Luque, Martos, Málaga, Marmolejo, El Carpio, etc. Tras ellos se situaban los coros ruteños, señoritas ataviadas con traje típico regional, Reinas y Damas de las fiestas, junta de gobierno, hermano mayor y la Santísima Virgen de la Cabeza, ataviada con su manto blanco de Reina, junto a la nueva saya blanca y vestidito del Niño Dios, que estrenasen el pasado año.
Banda de cornetas y tambores Monte Calvario de Martos abriría de nuevo el cortejo procesional al igual que hiciese en 2017, cerrándolo nuestra Banda municipal de música.
Fue sin duda un momento inolvidable a la vez que emotivo la llegada de la Virgen a la calle Fresno donde la Nuestra Señora pasaba por primera vez por delante de su recién adquirida casa de hermandad, inaugurándola oficialmente y descubriendo un azulejo en la fachada de la misma.
Eran cerca de las 4 de la tarde donde tras los canticos y vítores con la que los ruteños agasajamos a nuestra Morenita, entraría a su Templo.
By.- A,A
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