La Basílica de Nuestra Señora de la Cabeza

Nos disponemos en estas fechas a repasar con mas calma, el nombramiento del Real Santuario de la Stmª Virgen de la Cabeza, como BASÍLICA MENOR, que se dio a conocer durante la pasada Romería. Este tipo de elevaciones de un templo hacia cotas más altas, viene precedida, de una serie de gestiones que desde la Diócesis de Jaén se venían realizando, desde hacia varios años, aparte de los lógicos precedentes para dicho nombramiento.
El Real Santuario de Nuestra Señora de la Cabeza, pese a estar en un lugar de difícil acceso, viene siendo visitado por infinidad de peregrinos desde muchos siglos atrás, que venían a rendir culto a la Reina de Sierra Morena, una imagen de singular belleza, que cautiva solo con su mirada elevada a los cielos y la cual queda prendida en el corazón de los millares de romeros que anualmente la visitan. Antaño no se disponía de los medios de locomoción, que afortunadamente hoy tenemos, y la peregrinación duraba días, é incluso semanas dependiendo del lugar de procedencia, y a este lugar de difícil acceso venían a darse cita gentes de muy diversos puntos de la geografía nacional.
Muchas son las cofradías filiales, que desde tiempos inmemoriales, vienen acudiendo año tras año a la llamada de la Santísima Virgen. Todo ello ha conllevado a valorar por la Santa Sede muy positivamente todos estos méritos, por todos estos motivos SS. Benedicto XVI elevó a Basílica menor el Real Santuario de Nuestra Señora, morada de la Bienaventurada Virgen María, bajo su advocación de la Cabeza.
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