Con esa ocasión, Jesús es reconocido por un anciano judío como el Mesías, como el Señor que ha venido a salvarnos. El anciano Simeón proclama a Jesús como “luz para alumbrar a las naciones”. Por eso que la fiesta de “la Candelaria” nos muestra como ese pequeño Niño, nacido hace cuarenta días, será la luz que alumbre al mundo entero. Por eso el anciano Simeón alaba a Dios por poder haber visto con sus ojos y poder coger en sus brazos a Jesús, en quien se han cumplido las esperanzas del pueblo de Israel.
Pero atención… Qué el discurso del anciano Simeón tiene una segunda parte… Y que junto a la bendición y la alabanza anuncia el sufrimiento a la Santísima Virgen María: “una espada te atravesará el alma”. Eso es venir decirle: “María, tu Hijo y el mensaje que Él anunciará será aceptado gozosamente por muchos, pero será también rechazado por otros. Algunos, además, no querrán a tu Hijo, y se reirán de los que le sigan”. Esto es causa de sufrimiento para la Santísima Virgen María. Cada vez que decimos NO al Señor Jesús, cada vez que decimos NO a la Iglesia, cada vez que decimos NO a la voluntad de Dios expresada en los mandamientos… estamos clavando una espada de dolor en el alma de la Santísima Virgen María.
Por eso, si de verdad somos devotos de la Santísima Virgen, no podemos permanecer indiferentes ante el mensaje del Señor Jesús. No tomado sólo en lo que nos interese, no. Sino tomado en su totalidad, sin reservas… Y que nadie diga que no tiene necesidad de cumplir con lo que le diga la Iglesia, porque se equivoca. La Santísima Virgen María no tenía ninguna necesidad de purificarse, pero lo hizo, porque estaba mandado por la Ley de Moisés y Ella, como buena judía que era, cumplía con esa ley, aunque no le hiciera falta. Por eso, nosotros, que somos unos pobres pecadores, ¿vamos a quedarnos libres de cumplir con la Ley del Señor Jesús? Quien responda que no está muy equivocado y, lo que es peor, si se empeña en seguir diciendo que no, es que en el fondo, no quiere a la Santísima Virgen.
A nosotros nos toca, pues, decidir si acogemos en nuestro corazón la luz que el Señor Jesús manda a nuestras vidas; pero teniendo claro, que eso también implica que en el camino de nuestra vida encontraremos rosas y espinas, es decir, que tendremos momentos alegres y felices, pero también momentos de sufrimiento y de dolor. Así pues, los devotos de María Santísima de la Cabeza Coronada, hemos de participar fervorosamente en el piadoso Besapié al Niño Jesús que la Junta de Gobierno de nuestra Real Cofradía, conjuntamente con su Grupo Joven organiza para este domingo en la parroquia de San Francisco de Asís, colaborando fraternalmente con la VI campaña benéfica de recogida de alimentos, que serán destinados a Cáritas para compartirlos con los más necesitados.
Que al besar el pie de la Sagrada imagen del Divino Niño, del Chocolatín bendito de nuestra Virgen Morena, sepamos decirle SI. Que digamos SI a recibir la Luz de Cristo en nuestras vidas. Que digamos SI a vivir en gracia de Dios. Que digamos SI a estar unidos a Cristo en la celebración y en la recepción de los sacramentos, sobre todo en los de la Penitencia y la Eucaristía. Que digamos SI a Jesucristo, porque decir SI a Jesucristo es la mejor y la única forma de decirle SI a la Santísima Virgen María.
By.- R,C Director espiritual de al sonar de una campanilla
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