Romería de la Virgen de la Cabeza 2024.

domingo, 25 de abril de 2021

Suspendida Romería, desbordadas emociones.

Los sentimientos se confrontan, por segundo año consecutivo, para muchos, muchísimos devotos, no sólo en Andújar sino en incontables lugares de todas las geografías. En cualquier parte hay una cofradía, una entronizada piedad, o una devoción doméstica, enraizadas en la religiosidad litúrgica y popular en torno a la Virgen de la Cabeza.

 Y hoy, último domingo de abril, como viene siendo tradicional desde hace siglos, deberían tener lugar los momentos culminantes de la multitudinaria y universal romería de esta advocación mariana. Sin embargo, como digo, por segunda sucesiva ocasión, la pandemia, que sigue aun inoculándonos sus ponzoñas, hace que esta celebración quede suspendida y solo tenga lugar la misa pontifical, con un reducidísimo númerus clausus de asistentes. El devoto, el romero, cuando llega abril siente que el cielo, la primaveral revelación serrana, su callejero, sus personales lares, se confabulan en un azogue de plenitud que despierta en el costado de los profundos aleteos una rebosante herencia identitaria, un simbolismo espiritual, que el último domingo abrileño se hace irrefrenable impulso.

Un arrebato que transporta el alma al Cabezo de la sierra donde una vez más se produce el prodigio que abre de par en par el inmenso hontanar de las certezas. Por eso los sentimientos en estos días, y en este año enmascarado, se mezclan de un modo especial. No obstante hay que anteponer la responsabilidad junto a la observancia de las normas en una Romería que en sus celebraciones oficiales ha quedado nuevamente suspendida. Todo el atesorado anhelo, doblemente contenido, esas horas eternas que se precipitan al llegar la primavera, cuando un misterio extraordinario, fértil y lejano, nos llama, y el orbe se estremece en la curva del límite cuando las campanas del santuario tocan a rebato, este año es viento varado, velado sendero en la sed del tiempo.

La devoción a la Virgen de la Cabeza y su tradicional romería, ya han pasado a lo largo de los siglos por vicisitudes muy parecidas a las que ahora vivimos: guerras, pandemias, catástrofes y fatalidades de todo tipo. Pero a pesar de las adversidades, a pesar de humanas turbulencias, por encima de todo, este fervor subsiste pertinaz y elocuente, enclavado como símbolo sustancial de una identidad, de una religiosidad, o mejor dicho, de una espiritualidad; de un hábitat, que se revela de generación en generación. Es algo que se hace faro trascendente y alumbra las entretelas por encima de las heterogéneas manifestaciones ostensibles que acompañan todo el contexto devocional y festivo en torno a la Morenita. Expresiones que ayudan, vaya que sí; son muy importantes, , con sus ritos, con su cultura, con sus tradiciones, para amalgamar un caldo de cultivo donde fluye una fe, un sentido vital, una impar forma de ser, una fórmula colectiva de hilvanar mucha existencia con un proverbial sentido fraterno y convivencial, apiñadamente gozoso. Unos sacan el tambor romero, otros cosen volantes, estos se visten de azul andero; aquí ya tremolan las banderas, ahí preparan atalajes, allí acicalan los balcones, mientras en aquella casa lustran la jamuga. Bailes, música, ofrendas florales, encuentros peñísticos o cofrades, cultos devocionales, actos, comidas de hermandad. Las recetas gastronómicas propias de este tiempo, la logística que acompaña a todo el contexto romero, vivir esos diferentes momentos que cada cual tiene como preceptivos,… Hacer el camino al Cerro, bien a pie, o a caballo, o en carreta, o en diferentes vehículos. La parada del Puente. Sentir la fragancia primaveral y romera (que es lo mismo) en todo su esplendor. Escuchar ese repiqueteo de las campanas del Santuario cuando ya saben que un año más tierra y cielo estallarán en una lava de ambrosía maternalmente clara, en un abrazo estelar que hace que el alma se desentrañe, en un fulgor de fuego antiguo y milagroso que muestra el horizonte que hay más allá de nuestra perspectiva.

Mucho, mucho de todo eso está interrumpido en este año vírico. Pero eso no es óbice, para algo que es la piedra angular de esta ancestral devoción. La fe, las íntimas emociones, la memoria, la fantasía, los anhelos, el pálpito identitario, van con nosotros siempre, no necesitan aprobación o prohibición externa.

 Y, hoy, todo ese universo de querencias y sentires eclosionan en una primavera que se hace colosal para, desde un atronador silencio, ser regazo transparente, estremecernos mientras en nuestros profundos alcores, el misterio celeste de la Virgen de la Cabeza, nos arrebata el aliento.
By.- Alfredo Ybarra.

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La Virgen de la Cabeza y su Real Santuario.


Curiosidades

* Nuestra Virgen de la Cabeza posee cuatro coronas, cada una de ellas con su correspondiente corona para el Niño Jesus.La mas antigua de ellas es la que le regalo Juan de Piedra en el año 1788, es de plata en estilo imperial.Le sigue en antigüedad la donada por Agustina Mangas en el año 1872, es también en estilo imperial dorada.En el año 1953, Maria Susana Ariza le regala otra corona, que le es impuesta el 10 de mayo de ese año por el Canónigo ruteño D. Jose Torres Molina, para esa efemérides se confecciono un trono de claveles blancos.La corona es de estilo imperial con aureola.Posteriormente, en el año 1986 Francisco Martinez le regala la corona con la que el Obispo de Córdoba, Jose Antonio Infantes Florido la corono canónicamente.

* El regalo mas pintoresco que se ha puesto en la Mesa fue un burrito (de carne y hueso por supuesto).


* El recordado "Pacorro" fue cohetero de la Virgen durante mas de cincuenta años.

* Antiguamente el Hermano Mayor ofrecía a los hermanos de varal, una vez terminada la procesión de la mañana, una comida consistente en Borrego con patatas, que se preparaba en la fabrica de Anis Machaquito.Por supuesto no podían faltar varias arrobas de aguardiente y de vino.

* En el siglo dieciocho era costumbre contratar a un grupo de "gitanos" para que cantaran delante de la Virgen en su procesión.

* En el año 1948 se contrato una pirotecnia distinta a la que se venia contratando habitualmente y los cohetes eran tan malos, que ni poniéndoles gasolina ardían.

* Durante muchos siglos el viaje a la Romería de Andujar se hacia a lomos de caballerías, cuando llego la locomoción mecánica, se inicio la costumbre de acudir en camiones, y cuando llegaron a Rute los primeros autocares se emplearon estos para ir a la Romería.Estos autocares pertenecían a la Empresa Sanchez, y eran los mismos que cubrían la linea Rute-Lucena, por lo tanto mientras que los autocares estaban en la Romería se interrumpían los viajes entre Rute y Lucena.

* Durante mas de veinte años, acompaño en sus dos itinerarios a nuestra Virgen de la Cabeza la Banda de Cornetas y Tambores del Tercio Móvil de la Guardia Civil de Sevilla.Este acompañamiento se convirtió en una tradición, hasta que por una orden gubernamental este acuartelamiento se desmantelo y por consiguiente la Banda desapareció.


* Salida extraordinaria.- Con motivo de la guerra con Marruecos mando el Obispo Juan Alfonso Albuquerque Berión, sacar en procesión de rogativas a las imágenes que mayor devoción y culto recibieran en cada localidad saliendo en Rute nuestra Morenita el día 18 de Diciembre de 1859.

Nos cuentan las leyendas.......

Según cuenta la leyenda, una noche al volver los hermanos de cantar la aurora, se dispusieron a oír la Santa Misa, por aquellos tiempos era costumbre cubrir el camarin de la Virgen con un velo cuando no había culto, pues el llano estaba de tierra y así se impedía la entrada de polvo.Cuando tiraron de la cuerda, vieron que el velo no subía, entraron al camarin a arreglar la avería y vieron asombrados el borde inferior del manto de la Virgen mojado y cubierto de escamas; nadie supo dar una explicación a tan extraño fenómeno.
Pasado el tiempo, unos soldados ruteños que habían vuelto de la guerra de África, contaron que una noche, cuando se dirigían en barco a tan lejanas tierras, les sorprendió una terrible tormenta,entonces acordándose de que era sábado, y la aurora de la Virgen de la Cabeza estaría en la calle, rezaron juntos a la Virgen para que les salvara de una muerte segura, de inmediato la tormenta ceso y el mar entro en calma.Fue entonces cuando los hermanos supieron dar explicación al manto mojado y cubierto de escamas.

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...Una tarde al abrir el cura la iglesia, vio como la Virgen de la Cabeza se encontraba girada hacia su izquierda, mirando hacia el segundo llano, pensó que la noche anterior la Camarera hubiera subido al Camarin para arreglar algo en el vestido de la Virgen y había olvidado colocarla de nuevo mirando al frente, subió acompañado de dos monaguillos y la puso bien.Una vez finalizado este cometido, se dirigió al confesionario para atender a los fieles, observando a los pocos minutos que la Camarera de la Virgen entraba a la iglesia para oír la Santa Misa como hacia casi todos los días, se dirigió a ella para comentarle su olvido, contestándole esta que llevaba varias semanas de no subir al Camarin, asombrado el cura pensó que podían haber entrado ladrones, subieron al Camarin, a la Virgen no le faltaba nada de sus adornos, las puertas y ventanas de la iglesia estaban bien, no faltaba ninguno de los enseres de las diferentes capillas y altares.Nadie supo dar explicación de este fenómeno, y hasta el día de hoy es un misterio el porque la Virgen se giro aquella noche.

Presidentes de la Real Cofradía

En el año 1961 se aprueban unos nuevos estatutos, creándose en ellos el cargo de Presidente, desde entonces nuestra Real Cofradía ha tenido los siguientes presidentes:

- Francisco Salcedo Repullo:1961-1972
- Alfonso Cruz Ferreira:1972-1977
- Pedro Alarcon Luque:1977-1982
- Francisco Martinez Romero:1982-1986
- Francisco Ramirez Bueno: 1986-1990
- Comisión Gestora: 1990-1996
- Zacarias Jimenez Jimenez:1996-2004
- David Ruiz Cobos: 2004-2008
- Manuel Caballero Dominguez: 2008-2012
- Antonio Pacheco Montes: 2012-2016
- María Victoria Cruz Molina: 2016-2020
- Comisión Gestora: 2020-2022
- Andrés Cobos Moreno: Actual presidente
* Según la normativa vigente de la Iglesia, el tiempo máximo que una persona puede ocupar el cargo de Presidente es de ocho años consecutivos.